Hoy nos hemos levantado con la noticia de la Generatitat ha adjudicado la primera fase de las obras del recinto pesquero del puerto, obras que se realizarán conforme al proyecto de la Generalitat, y con el que no está de acuerdo ni la plataforma en su conjunto, ni ninguno de sus miembros, ni ninguno de los partidos que concurren a las próximas elecciones, excepto el PP que, a la voz del mando, lo apoya incondicionalmente.
A cuatro días antes de las elecciones la Generalitat de Valencia gobernada por el PP acaba de hipotecar un puerto que es nuestro sentenciándolo a muerte, porque las obras se ejecutarán según su calamitoso proyecto que cercena todas sus posibilidades de desarrollo futuro por los siglos de los siglos.
La Generalitat y el Partido Popular que la sustenta nos han engañado vilmente incumpliendo su compromiso de hace dos meses para mejorar el proyecto de reforma incorporando la mayor parte posible de nuestras propuestas. No han enviado ningún técnico, ni dos semanas después de nuestra última reunión en Valencia tal como se comprometieron, ni dos meses después. Tampoco nos han contestado a la petición de nueva reunión cursada hace dos semanas.
La buena voluntad que nos manifestaron, el completo silencio consiguiente y la actual adjudicación, han sido los actos teatrales de un completo engaño para acallar el ruido que hubiésemos podido provocar en época de elecciones. Engaño que les está permitiendo continuar los pasos que han tenido previstos desde el comienzo, pasando completamente por encima de todos nosotros.
La resolución de la Generalitat le ha dado unos derechos a Lubasa y a la otra empresa adjudicataria por los que, en caso de modificación o anulación de la adjudicación, supondría el pago de unas indemnizaciones millonarias.
Han adjudicado las obras 4 días antes de las elecciones, para tenerlas comprometidas antes y casi sin tiempo para que nadie pueda reaccionar. No fuera cosa que pierdan el gobierno y luego “no venga la Formula-1”.
Si con todo ello alguien sigue creyendo en la bondad del PP, que les siga votando.
A partir de este momento vamos a estar en asamblea permanente para decidir las acciones a realizar para evitar el desmán que se nos avecina.
A cuatro días antes de las elecciones la Generalitat de Valencia gobernada por el PP acaba de hipotecar un puerto que es nuestro sentenciándolo a muerte, porque las obras se ejecutarán según su calamitoso proyecto que cercena todas sus posibilidades de desarrollo futuro por los siglos de los siglos.
La Generalitat y el Partido Popular que la sustenta nos han engañado vilmente incumpliendo su compromiso de hace dos meses para mejorar el proyecto de reforma incorporando la mayor parte posible de nuestras propuestas. No han enviado ningún técnico, ni dos semanas después de nuestra última reunión en Valencia tal como se comprometieron, ni dos meses después. Tampoco nos han contestado a la petición de nueva reunión cursada hace dos semanas.
La buena voluntad que nos manifestaron, el completo silencio consiguiente y la actual adjudicación, han sido los actos teatrales de un completo engaño para acallar el ruido que hubiésemos podido provocar en época de elecciones. Engaño que les está permitiendo continuar los pasos que han tenido previstos desde el comienzo, pasando completamente por encima de todos nosotros.
La resolución de la Generalitat le ha dado unos derechos a Lubasa y a la otra empresa adjudicataria por los que, en caso de modificación o anulación de la adjudicación, supondría el pago de unas indemnizaciones millonarias.
Han adjudicado las obras 4 días antes de las elecciones, para tenerlas comprometidas antes y casi sin tiempo para que nadie pueda reaccionar. No fuera cosa que pierdan el gobierno y luego “no venga la Formula-1”.
Si con todo ello alguien sigue creyendo en la bondad del PP, que les siga votando.
A partir de este momento vamos a estar en asamblea permanente para decidir las acciones a realizar para evitar el desmán que se nos avecina.
